martes, 26 de octubre de 2010

PAZO DE MARIÑAN


El Pazo está situado en el municipio de Bergondo, célebre también por las sagas de célebres familias de orfebres que han salido de estas tierras. Este es el corazón de la comarca de las Mariñas, llamadas también "Mariñas dos Condes" en referencia los condes de Traba y Andrade, de gran actividad entre Betanzos y Pontedeume, núcleos que obligadamente debe conocer el visitante de Mariñán.

Los orígenes del Pazo de Mariñán se sitúan a mediados del siglo XV, en una defensa mandada construir por Gómez Pérez das Mariñas, noble caballero de la corte de Juan II, que participó de una manera activa en las luchas Irmandiñas. Gómez Pérez das Mariñas se autotituló "Señor das Maríñas, de Mesía e de Moscoso". La construcción inicial se conoce como "de Bergondo", no de Mariñán. El Pazo y sus jardines son conjunto histórico-artístico y monumental por Real Decreto de 5 de octubre de 1972. Entre 1972 y 1975 la Diputación Provincial promueve las obras de reconstrucción y ampliación con una nueva ala residencial. En la actualidad tiene tres usos: actos institucionales, centro de cursos y museo del propio Pazo, reuniendo buena parte de la colección artística de la Diputación.

La arquitectura del Pazo presenta en planta una estructura en "U", configuración típica de muchas de estas construcciones. La fachada principal la preside una escalinata, de las denominadas "imperiales".En su parte baja dos esculturas en piedra representan a dos sirvientes en actitud de recibir al recién llegado. Al subir por ella el visitante accede a la sala de entrada que hace de recibidor y distribuidor a las demás dependencias. La fachada posterior merece una especial atención. La domina una amplia terraza con balaustradas graníticas y una curiosa organización de accesos, pues intercala tramos quebrados en ángulo, rematados con esculturas de jarrones, fuentes y canales para juegos de agua. Todo ello realizado en granito gallego y con similar inspiración a algunas grandes escalinatas barrocas de Compostela. Aunque las escalinatas de Mariñán evocan para muchos la arquitectura palacial italiana, quizás estemos ante una creación de Fernando de Casas Novoa, autor de la fachada del Obradoiro en la catedral de Santiago.

La terraza es la "solaína" que, como su nombre indica es el sitio destinado a tomar el sol. Esto explica la existencia de bancos en la pared. Unas puertas la comunican con el interior, con el antiguo comedor, de manera que si el tiempo acompañaba se convertía en una prolongación de las dependencias interiores. Actua como nexo de unión con esa otra sala de estar al aire libre que es el jardín.

En el interior destaca la gran lareira; cocina y lugar de encuentro de los sirvientes de la casa, además de calentar el comedor y los aposentos de los señores. No dejaremos de ver el tiro de la chimenea. La horizontalidad imperante en los pazos en los pazos gallegos se ve rota únicamente por la torre y la chimenea. Las grandes dimensiones se explican en parte por la tendencia del Barroco a buscar efectos sorpresa y sensación de inestabilidad, que se traducen en colocar grandes volúmenes en las partes altas de los edificios. El zaguán es la entrada a la parte noble. En esta zona los pisos serían de madera de castaño, roble o pino. En otras zonas se usaría la piedra, como es el caso de la lareira, en tierra, quedaban las bodegas, las despensas, las cuadras y otras estancias de la planta inferior.

El Pazo, desde los años de su rehabilitación, 1975, trata de ambientarse con muebles y objetos artísticos. Así es que reúne una significativa pinacoteca, mayoritaríamente de autores gallegos, verdadera antología sobre todo de los siglos XIX a nuestros días. Así es que por sus dependencias se reparte obra de autores novecentistas, modernistas y renovadores.

En Mariñán la arquitectura se complementa con el paisaje típico de las Mariñas que abra a la ría de Betanzos, formada por el río Mandeo. Parajes que ofrecen marcados contrastes verdes y reflejos que supo captar el pintor impresionista Lloréns.

El jardín se divide en tres zonas: ornamental, hortícola y la arboleda. Unos y otros reflejan las distintas formas de aprovechar el terreno. En principio era copia del jardín hortícola monacal. El parterre fue trazado a comienzos del siglo XIX por un jardinero francés, tomando como base el que ya existía, mucho más sencillo. Respecto a la autoría del diseño es posible que su autor fuera Mathias Tiebe, que en la misma época se hizo cargo de la reforma de los jardines de los pazos de A Ribeira y Vilasuso en el municipio de Carral.

Fuente: esgalicia.es












1 comentario:

  1. La segunda y penúltima foto no corresponden al Pazo de Mariñán.

    Un saludo

    www.visitapazo.com

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